Ubicada a las faltas del Cerro de la Campana, la colonia La Matanza tiene más de 100 años de historia, misma que es rememorada y relatada por sus vecinos, quienes se reúnen en “La esquina de la gente bonita”.
Desde hace ocho años, cada lunes los vecinos de la colonia La Matanza se reúnen para convivir y recordar anécdotas que han vivido en la colonia que tiene más de 100 años fundada.
Es “La esquina de la gente bonita” ubicada en las calles La Matanza y Augusto César Sandino, el punto de reunión entre vecinos que con sus ojos han visto el desarrollo de la colonia desde que “El rastro” se ubicaba en el corazón de ella.
“Es uno de los primeros barrios de Hermosillo, de hecho, donde está el parque, ahí era el rastro, por eso le dicen la matanza, porque aquí mataban las vacas, lo cierran en el año 66 y se lo llevan para allá dónde está la peni y también se llevan la peni, luego se lo llevan a la carretera a Mazatán, pero esa ya es otra historia”, contó Alfonso Ung Navarro, integrante de los vecinos de la colonia.
La comunidad de vecinos que se reúnen en la esquina, narran que toda su vida han vivido en esta colonia, la cual resalta por su nombre, su ubicación y por ser hogar de taqueros importantes de Hermosillo.
“En este barrio hay doctores, licenciados, enfermeras y sobre todo están los taqueros, los de las taquerías “El Chino” es de mi hermano, yo tenía la taquería “Irazema”, los Roma tienen taquería, mi primo Mario, hay fuente de trabajo”, agregó Alfonso Ung Navarro.
El pasado 17 de noviembre se celebró un aniversario más de la fundación de este sector de la localidad, el cual a sus más de 100 años, se ha convertido en un espacio tranquilo para convivir.
“En los 80, los barrios eran conflictivos, de hecho aquí ya no es conflictivo, pero ya muy compuesto, hay seguridad pública, servicios municipales, la basura, drenaje, agua, ya es otro modo de vivir”, aseguró el vecino.
“Antiguamente se han registrado problemas fuertes aquí, pero los hay como en todas partes hay, la seguridad ha aumentado mucho”, opinó Víctor Manuel Abrego Santacruz, también vecino de la colonia.
Las calles que hoy tienen pavimento antes eran parte de la terracería de las faldas del Cerro de la Campana e incluso las vialidades de La Matanza vieron crecer al artista Carin León.
También en la cárcel vieja se vivieron experiencias, narró Ramón Santacruz, quien de pequeño vio cómo los detenidos quemaron la bandera de México en el asta que se encontraba en una torre del antiguo reclusorio.
“En esa prisión los gabachos quemaron la bandera y ahí fusilaron a los últimos dos detenidos que ahorita están enterrados en el panteón Yáñez, a ellos los enterraron de cabeza”, compartió Ramón Santacruz.
Entre los personajes que resaltan de la esquina de la gente bonita está Ramón Uez Armenta, a quién también conocen en el barrio como “El Cara de Pala” y quien menciona es tío del artista Carin León.
“Aquí creció, de niño iba acá en la escuela primaria Club de Leones número 1, aquí vivían sus papás, ahí andaba”, contó Uez Armenta.
Gracias a como se ha desarrollado la colonia, hoy en día los vecinos más antiguos hijos de los fundadores de la colonia pueden reunirse para dialogar acerca de las necesidades y problemáticas de la colonia, así como pasar un momento agradable en compañía de los amigos de toda la vida.
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