El gobierno de EE. UU. demandó a Illinois, Chicago y sus líderes por bloquear las normas migratorias. Según la demanda, presentada este jueves, el estado y la ciudad han impedido el trabajo de ICE y se han negado a cooperar con las autoridades federales en temas de inmigración.
El Departamento de Justicia busca que la corte elimine las leyes locales que convierten a Illinois y Chicago en “ciudades santuario” y las obligue a colaborar con ICE. Además, anunció que más estados santuario podrían enfrentar demandas similares en el futuro.
Como parte de esta estrategia, se suspenderán fondos federales para ciudades santuario como Chicago, California, Filadelfia y Washington D.C., hasta que se revisen sus políticas y se eliminen aquellas que violen la ley.
El equipo de Trump espera que, si el caso llega a la Corte Suprema, la mayoría conservadora de jueces respalde la demanda. Esto podría cambiar la forma en que las ciudades protegen a los migrantes y obligarlas a cumplir las políticas federales de inmigración.
Mientras tanto, ICE informó que sus centros de detención están sobrepasando su capacidad, con más de 42,000 inmigrantes bajo custodia, cuando el límite oficial es de 38,521. Debido a esto, han empezado a liberar a algunos detenidos, colocando dispositivos de rastreo en sus tobillos para monitorearlos.