Dos socios del fundador de la plataforma de criptomonedas FTX, Sam Bankman-Fried, se declararon culpables de fraude electrónico, entre otros delitos, anunció el fiscal del distrito sur de Nueva York, Damian Williams.
La ex directora ejecutiva de Alameda Research, una empresa fundada por Bankman-Fried, que era el brazo inversor de FTX, Carolyn Ellison, y el cofundador de FTX, Gary Wang, se han declarado culpables de cargos criminales “en relación con su papel en el fraude que contribuyó al colapso” de la compañía, dijo Williams en un video.
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Williams añadió que ambos están colaborando con su investigación sobre “el gran proyecto de fraude” que supuestamente lideró el líder de las criptomonedas y que contribuyó al espectacular desplome de la compañía, que ha causado estragos en el sector.
El fiscal aseguró que la investigación “avanza rápidamente”.
Por otro lado, el fundador de la plataforma de criptomonedas llegó a Nueva York la noche del miércoles para ser juzgado de los múltiples cargos que le atribuyen las autoridades estadounidenses.
Sam Bankman-Fried, aterrizó de regreso a Estados Unidos tras ser extraditado desde Bahamas, donde fue detenido, y haber aceptado ser enviado de regreso a Nueva York para ser juzgado, informó este jueves la cadena estadounidense FOX.
Según las cadena, el presunto defraudador fue visto alejándose de la pista de aterrizaje, tras llegar a un aeropuerto neoyorquino, rodeado de agentes del orden, antes de que fuera introducido en una camioneta y se marchara escoltado por una caravana de vehículos.
El detenido comparecerá ante un juez federal “lo antes posible”, dijo en un comunicado el fiscal federal de Manhattan, Damian Williams, informó hoy el diario The New York Post.
Bankman-Fried aceptó en Bahamas su extradición en parte por su “deseo de compensar a los clientes afectados” por la quiebra de FTX, que se declaró en bancarrota el pasado 11 de noviembre tras un rápido colapso después de que muchos usuarios se apresurasen a retirar sus fondos en medio de informaciones que ponían en duda la solvencia de la compañía.
El equipo legal de Bankman-Fried informó el lunes de que su cliente decidió renunciar a su derecho a impugnar la extradición, lo que significa que será juzgado en Estados Unidos, donde está acusado de ocho cargos por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York.
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Entre los delitos que se le imputan están los de fraude electrónico, lavado de dinero y violación de las leyes de financiación de campañas políticas.
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