La Asociación Mexicana de Bebidas (MexBeb) está preocupada por la propuesta del Gobierno federal de subir un 87% el impuesto a las bebidas azucaradas. Según ellos, esto sería un golpe fuerte al bolsillo de los consumidores, afectaría la economía y no solucionaría los problemas de salud que se quieren combatir.
El aumento del IEPS pasaría a 3.0818 pesos por litro, lo que haría que los precios de los refrescos y bebidas saborizadas subieran entre un 10% y 15%. Esto encarecería los productos que muchas personas compran diariamente.
MexBeb advirtió que este cambio podría causar la pérdida de hasta 150 mil empleos en cinco años y perjudicar seriamente a los pequeños comercios, incluyendo más de 1.2 millones de tienditas que dependen mucho de estas ventas. Muchas podrían incluso verse obligadas a cerrar.
La asociación también criticó que se plantee un impuesto a las bebidas con edulcorantes sin calorías. Señalan que esto desincentivaría la creación y venta de opciones más saludables que ayudan a reducir el sobrepeso y la obesidad.
Por último, MexBeb destacó que la industria de bebidas no alcohólicas genera más de 1.9 millones de empleos y aporta el 3.4% del PIB. Por eso, aseguran que subir el impuesto tendría un fuerte impacto económico a nivel nacional.




