El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), que forma parte del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, “ha retomado las operaciones de arresto contra trabajadores indocumentados en industrias clave como la agricultura, hotelería y restaurantes”. Esto deja atrás la pausa que se había considerado luego de las quejas de distintos sectores económicos.
De acuerdo con el periódico The Washington Post, “la nueva instrucción fue comunicada recientemente a los agentes del ICE durante una llamada interna”. Personas cercanas al tema dijeron que esta decisión cambia el rumbo que el gobierno venía tomando, ya que antes se mostraban más comprensivos con los argumentos de empresarios preocupados por cómo las redadas afectaban la disponibilidad de trabajadores.
“Durante su administración, el Presidente Donald Trump había insinuado que estos sectores podrían recibir cierta flexibilidad debido a su dependencia de trabajadores migrantes”, sobre todo después de que agricultores y representantes del sector hotelero dijeron que esas políticas ponían en riesgo sus negocios.
Sin embargo, “el restablecimiento de estas medidas de control migratorio apunta a un endurecimiento en la aplicación de la ley”, a pesar de que los dueños de negocios ya habían advertido sobre los efectos negativos que esto podría traer para la economía.
“Esta decisión también genera inquietud entre defensores de derechos migrantes”, quienes consideran que esto es un retroceso en el trato más humano que se esperaba por parte de las autoridades migratorias en Estados Unidos.