Veracruz /
Pese a ocupar Veracruz el primer lugar nacional en producción de cítricos, los citricultores de la entidad enfrentan una seria crisis, debido a la alza en el precio de fertilizantes y plaguicidas y el bajo precio que les pagan por sus cosechas.
Los campesinos obtienen apenas 5 pesos por kilo de limón persa calidad de exportación; 2 pesos si la fruta está rayada y un peso si es considerada de tercera por su tamaño.
Los intermediarios o coyotes lo revenden en 10 pesos o más en las empacadoras, que a su vez exportan la fruta por la que obtienen en el peor de los casos 60 o 70 pesos por kilo en países asiáticos o europeos.
La producción de cítricos implica trabajar todos los días, durante jornadas de 8 o 9 horas para podar los árboles, retirar la maleza, aplicar fertilizantes o cortar las frutas que ya están listas para su comercialización.
Concluido el corte, trasladan los limones en burros, caballos o en el mejor de los casos, si el camino está bien, a bordo de algún vehículo hasta donde se encuentran los coyotes.
Veracruz es el principal productor de limón persa en el país, seguido de Michoacán y Oaxaca. A inicios de este año, tras una caída en la producción a nivel nacional, el producto alcanzó un precio de más de 100 pesos el kilo en los mercados, aunque el productor recibió menos de 20 pesos por cada kilo.
México es el segundo productor de limón en el mundo; en el periodo 2020 /2021 se exportaron más de 850 mil toneladas, 6 por ciento más que en 2019.
Con base en datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) se exportan cítricos a Estados Unidos, Países Bajos, Japón, Alemania, Reino Unido, España, China, Turquía, Irán e Italia.
Sin embargo, el oro molido, como consideran al limón, tiene molidos a los citricultores veracruzanos.
Andrés García Landa, citricultor de Misantla, señaló que con “los cítricos como es el limón no nos dan el precio adecuado, el que debería de ser, porque se sabe que el limón es oro molido, pero de molido para nosotros no hay nada de eso.
Explicó que actualmente se los pagan a escasos 130 pesos o 140 pesos la caja de 30 kilos. “Producirlo nos cuesta mucho trabajo. Los que aquí ganan son el coyote, el coyotaje, porque ellos tienen carro, los empleados de las empacadoras, ni siquiera es el mero dueño, ellos traen carro del año y nosotros ya no tenemos ni carro.
¿Que necesitamos? Necesitamos que nos mejoren el precio del limón. Un precio de garantía serviría? Claro que sí, un precio de garantía.
En ese mismo sentido, Abel Parra Velázquez, también productor del cítrico, lamentó la mínima ganancia que obtienen con sus cosechas.
“Nos lamentamos y decimos que cómo es posible que al productor nos vengan a pagar un promedio de 6 pesos el kilo y allá en el supermercado el precio de 20 pesos no ha bajado, 30, 40, 50 pesos entonces nosotros ahorita esperamos que repunte porque es la temporada en qué hay menos fruta y entonces es cuando el precio sube.
“Como productores si nos cuesta mucho, los fertilizantes están carísimos, un fertilizante que costaba 700 pesos se fue al doble, vale ahora mil 500, imagínese hay que darle dos o tres fertilizadas al año al limonar para que produzca”, explicó Abel.
Lucy Hernández Molina, citricultora misantleca, expresó que además del trabajo para cultivar los cítricos, sufren por el mal estado de los caminos saca cosecha.
“Es mucho trabajo o sea, hay que hacer mucho y se nos viene quedando poco y le digo a mi esposo, pues el camino luego está bien feo y tenemos que entrar a como nosotros podamos a cómo se nos preste el momento, ya sea a veces entra la camioneta hasta acá y a veces se saca el producto en animales como burros, caballos y así.
“Que haya apoyos para que no nos quede tan poco económicamente porque vuelvo a repetir es mucho trabajo el que se hace y muy poco dinero el que queda en manos de nosotros como productores”, lamentó Lucy.
Toda esa situación los desalienta y les baja la moral.
Los citricultores admiten, sin embargo, que necesitan organizarse, eliminar a los intermediarios y fijar un precio de garantía como el que tiene la caña, pero para eso requieren el apoyo del gobierno.
Abel consideró que “tal vez las dependencias de gobierno encargadas de la citricultura deberían regular el precio, que intervinieran y se mejore el precio, porque algo que nos perjudica también son los intermediarios pues ellos se llevan una buena parte de lo que nosotros directamente pudiésemos ganar si lo lleváramos a una empacadora.
Plantean replicar la figura del Inmecafé que en su momento organizó a los Cafeticultores.
José Alfredo Domingom, productor de cítricos, mencionó que “desde el propio Inmecafé se organizó a los productores en aquel entonces del café; yo creo que una figura similar bien podría caber desde una instancia del gobierno que pueda intervenir y proteger los derechos de los productores, eso sería mucho más fácil para poder organizarnos.
“Obviamente primero tendríamos que organizarnos como productores en asociaciones para poder hacer un bloque en común y exigir un mejor precio para nuestros productos; en segundo lugar ver la posibilidad de una empacadora, obviamente hacer un estudio de la viabilidad económica de cuánto se requiere invertir para poder ver si estamos en condiciones de nosotros como grupo hacerlo y la tercera también esta misma organización puede servir también para presionar al gobierno y que pueda intervenir en el establecimiento de precio de garantía”.
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