En una entrevista con la periodista Mariana Devine, le preguntaron a Donald Trump si hablaría con Elon Musk después del pleito que tuvieron. El presidente de Estados Unidos dio a entender que no lo descarta, pero que por ahora no es algo que tenga en mente. “Supongo que podría, pero, ya sabes, tenemos que enderezar el país, y mi única función ahora es que este país vuelva a un nivel superior al que ha tenido nunca”, dijo Trump en el episodio que salió hoy.
La entrevista fue grabada el lunes, pero se publicó este miércoles, justo cuando Elon Musk dijo que se arrepiente de “algunas” de las cosas que dijo sobre Trump. “Las críticas fueron demasiado lejos”, publicó en su red social, X.
Durante la charla, Trump fue claro: ya no le da importancia al tema. “No sé cuál es su problema, la verdad. No lo sé. No he pensado mucho en él últimamente”, dijo sobre Musk, quien fue uno de sus principales apoyos en la campaña presidencial que lo llevó de nuevo a la Casa Blanca.
También comentó que cree que Musk “se siente muy mal” por todo lo que pasó. El conflicto comenzó porque el empresario criticó con dureza el plan fiscal de Trump, diciendo que iba a aumentar el déficit público por más de 2 billones de dólares. Musk incluso llamó a ese paquete económico una “abominación repugnante”, y dijo que echaba abajo su trabajo en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), del que se separó en mayo.
La pelea subió de tono rápidamente en redes sociales. Trump amenazó con cancelar los contratos millonarios que Musk tiene con el Gobierno. Musk, por su parte, acusó a Trump de tener vínculos con el caso de Jeffrey Epstein y aseguró que sin su apoyo, Trump no habría ganado las elecciones de 2024. Ahora, Musk ya borró esos tuits y parece estar dispuesto a hacer las paces.
Un dato curioso es que el Tesla rojo que Trump le compró a Musk como símbolo de apoyo ya no está en la Casa Blanca. Nadie ha dicho si lo vendió o si se lo regaló a alguien.