Donald Trump asistió al estreno del musical Los Miserables en el Centro Kennedy en Washington D.C., donde fue recibido con una mezcla de aplausos y abucheos. Esta fue su primera visita al recinto desde que regresó a la presidencia en enero. Lo acompañaron figuras cercanas como Melania Trump, el vicepresidente J.D. Vance y la fiscal Pam Bondi.
Durante el intermedio, un espectador le gritó una grosería, lo que provocó aplausos entre algunos asistentes. También se notó la presencia de drag queens como protesta por los comentarios de Trump en contra de este tipo de espectáculos. A pesar de la tensión, el evento se desarrolló con normalidad y Trump saludó a los presentes en la alfombra roja.
La obra incluyó escenas de protestas y violencia que, para algunos, reflejaban la situación actual en ciudades como Los Ángeles. El gobernador de California, Gavin Newsom, ironizó en redes sobre la presencia de Trump en una historia de rebelión. Algunos actores se habrían negado a actuar en señal de rechazo, aunque Trump le restó importancia.
Desde su regreso al poder, Trump ha hecho varios cambios en la dirección del Centro Kennedy, reemplazando a la antigua junta con aliados cercanos. Entre ellos están la esposa del vicepresidente, conductoras de Fox News y su jefa de gabinete. Su objetivo declarado es “recuperar” el centro y eliminar lo que llama propaganda política.
Además, Trump propuso eliminar fondos federales para las artes y los museos. Esto ha generado protestas, cancelaciones de giras como Hamilton y la renuncia de varios asesores culturales. El Centro Kennedy, que fue creado con una visión apartidista, se encuentra ahora en medio de un fuerte conflicto político.