Puerto Rico está viviendo una fuerte conmoción tras el asesinato de una joven de 16 años durante una fiesta de fin de verano. La víctima, Gabriela Nicole, fue atacada brutalmente por un grupo de chicas que la apuñalaron varias veces frente a su mamá, quien la había acompañado para evitar cualquier problema.
Según los primeros reportes, Gabriela ya había tenido pleitos anteriores con algunas de esas chicas, por lo que pidió a su madre, Lisandra Rosario, que la acompañara al evento para sentirse más segura.
Al principio todo parecía normal, pero al salir del lugar, un grupo de chicas la interceptó. Mientras unas detenían a su mamá, otras la atacaron.
Las autoridades creen que la agresión fue “planeada con antelación”, ya que una de las atacantes escondía un cuchillo dentro de una peineta y lo usó para apuñalar a Gabriela entre 7 y 8 veces.
Un amigo de la víctima, también menor de edad, intentó defenderla pero resultó herido. Ambos fueron llevados al hospital, aunque lamentablemente Gabriela no sobrevivió. Su amigo fue dado de alta horas después.
En el funeral, su mamá dijo con dolor: “Mi corazón está destruido. Me lo arrancaron cuando me arrebataron a la luz de mis ojos”.
El 19 de agosto, las autoridades lograron detener a varias de las presuntas responsables, quienes tienen entre 16 y 20 años. La ministra Lourdes L. Gómez Torres confirmó que entre ellas hay menores y adultas, además de que el FBI entró al caso porque había sospechas de que algunas intentaran huir de la isla.
