Por Robert Mur
Un motín en una cárcel de mujeres de Honduras dejó este martes al menos 41 reclusas muertas. Los hechos tuvieron lugar en el Centro Femenino de Adaptación Social (Cefas), una prisión situada en el municipio de Támara, en el extrarradio de la capital del país, Tegucigalpa.
Según informa el principal periódico hondureño La Prensa, las muertes fueron producto de una pelea entre internas pertenecientes a dos bandas, la Mara Salvatrucha y la pandilla Barrio 18.
El mismo diario asegura, citando fuentes extraoficiales, que 25 reclusas fallecieron calcinadas y 16 fueron acribilladas y sostiene que el motín dejó “decenas de mujeres muertas”.
La viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, ordenó la intervención del penal con “mano dura” a través de su cuenta de Twitter.
“Bueno, acción y reacción, mano dura ahora en la cárcel femenina de Támara. No vamos a tolerar actos vandálicos, ni tampoco irregularidades en esta cárcel. Se autoriza intervención inmediata con acompañamiento de bomberos, policía y militares. Se declara emergencia”, tuiteó Villanueva.
Paralelamente a estos incidentes en la cárcel de Támara, se produjo también la intervención policial en la prisión masculina de Ilama, a unos 300 kilómetros de Tegucigalpa, tras producirse tiroteos en el interior del penal.
Información de La Vanguardia
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