El juicio contra Sean Combs, conocido como Diddy, ha sido uno de los más mediáticos del momento en Estados Unidos. El artista enfrenta cargos muy graves como tráfico sexual, crimen organizado y explotación. En las últimas semanas, han testificado personas muy cercanas a él, como trabajadoras y exparejas, quienes han relatado situaciones de abuso y violencia que vivieron a su lado.
Uno de los testimonios más impactantes fue el de la cantante Cassie Ventura, quien embarazada y con mucho valor, compartió en la corte los abusos que sufrió durante años de parte del rapero. Otra mujer identificada como “Jane” también declaró que fue obligada a tener relaciones sexuales con extraños mientras era grabada por Combs. Ambas relataron que, además de sufrir violencia física, eran manipuladas emocionalmente y que usaban drogas para soportar la situación.
El juicio dio un giro esta semana luego de que el juez reemplazara a un miembro del jurado por dar información inconsistente sobre su lugar de residencia. Los abogados de Combs protestaron, alegando discriminación racial, pero la composición del jurado sigue siendo mayoritariamente diversa. A pesar de sus intentos, la defensa no ha logrado que se anule el juicio.
Durante las audiencias también se presentaron mensajes entre Combs y su exjefa de personal, Kristina Khorram, donde se habla de la organización de encuentros sexuales. La fiscalía usa esta evidencia para reforzar los cargos de crimen organizado y tráfico de personas, que podrían llevar al artista a pasar hasta 20 años en prisión si es declarado culpable.
Incluso Kanye West apareció en los juzgados para mostrarle apoyo, aunque no se le permitió entrar a la sala. La presencia del también rapero llamó la atención, ya que ha sido el único famoso que se ha solidarizado públicamente con Combs durante este proceso. El juicio sigue en curso y promete más revelaciones en los próximos días.