Katy Perry vivió una experiencia única al formar parte de la primera tripulación completamente femenina que viajó al espacio con Blue Origin. Al aterrizar, expresó su emoción diciendo: “Estoy tan agradecida de representar a una mujer valiente en mi familia”, dedicando el vuelo a su madre, hermana e hija.
Durante el vuelo, Perry llevó una pequeña margarita como símbolo de su hija, Daisy, quien la esperaba vestida de astronauta. Al regresar a casa, Katy compartió en redes sociales una imagen preparando el almuerzo escolar de su hija, con un pan en forma de estrella, mostrando cómo volvió rápidamente a su rutina diaria.
A pesar de algunas críticas en redes sociales, la cantante describió el viaje como “increíble” y destacó la importancia de mostrar valentía a su hija. Su participación en esta misión histórica no solo marcó un hito en los viajes espaciales comerciales, sino que también inspiró a muchas personas alrededor del mundo.
