La reconocida marca de moda **Guess** ha generado una intensa conversación global tras lanzar su más reciente campaña publicitaria con una modelo completamente generada por inteligencia artificial. La imagen fue publicada en la edición de agosto de la revista *Vogue*, una de las plataformas más influyentes del mundo de la moda.
La protagonista de la campaña no existe físicamente: fue diseñada por la agencia creativa **Seraphinne Vallora**, especializada en generar rostros y cuerpos hiperrealistas mediante IA. Aunque la imagen mantiene la estética de una sesión fotográfica tradicional, el proceso creativo se basó en algoritmos entrenados con datos visuales, sin intervención de modelos humanas.
Según Guess, el objetivo fue experimentar con nuevas tecnologías visuales para explorar un “futuro digital en la moda”. Sin embargo, la propuesta ha sido fuertemente criticada por usuarios en redes sociales, diseñadores y modelos, quienes consideran preocupante la falta de diversidad, la omisión de créditos humanos y el posible desplazamiento laboral que este tipo de herramientas podría provocar.
Además, varias personas cancelaron sus suscripciones a Vogue tras descubrir que las imágenes no mostraban a personas reales. Aunque la campaña incluye un aviso legal señalando que la modelo es ficticia, la indicación es considerada poco visible para el público promedio.
A pesar de la controversia, esta acción de Guess marca un punto de inflexión en la relación entre la moda, la publicidad y la inteligencia artificial. Otras marcas como H\&M, Mango y Motorola ya han comenzado a incursionar en el uso de modelos virtuales, anticipando lo que podría ser una nueva etapa en la industria creativa.
La campaña ha abierto un debate global sobre los límites éticos y creativos del uso de IA en medios visuales, y ha planteado preguntas urgentes sobre representación, transparencia y el futuro del modelaje profesional.