El actor Barry Keoghan compartió un mensaje en la red social X el pasado viernes para pedir respeto tras su reciente separación de la cantante Sabrina Carpenter. Además, decidió cerrar su cuenta de Instagram porque no aguantaba más los comentarios negativos que ha estado recibiendo últimamente.
En su publicación, Keoghan dijo que “se están cruzando demasiados límites” con los ataques en internet, donde lo critican por su apariencia, su personalidad y hasta su rol como papá. Según sus palabras: “Mi nombre ha sido arrastrado por internet de maneras que normalmente no suelo responder. Ahora tengo que responder porque esto ha llegado a un punto donde se están cruzando demasiados límites”.
El actor también contó que el acoso no se quedó solo en las redes, ya que algunas personas llevaron el hostigamiento al plano personal. Incluso, llegaron a tocar la puerta de la casa de su abuela y a intimidar a su ex, Alyson Sandro, y a su hijo, Brando. Keoghan recalcó que está enfocado en ser un buen ejemplo para su hijo y dijo estar preocupado por cómo estos comentarios podrían afectarlo en el futuro.
“Cada día trabajo más duro para exigirme en todos los niveles y ser la persona más sana y fuerte para ese niño. Quiero darle oportunidades para aprender, fallar y crecer. Quiero que pueda admirar a su papá, que confíe plenamente en mí y sepa que siempre estaré para apoyarlo pase lo que pase. Necesito que recuerden que él tendrá que leer todo esto sobre su padre cuando sea mayor. Por favor, sean respetuosos con todos”.
Según personas cercanas a la pareja, la ruptura entre Keoghan y Carpenter fue en buenos términos y se debió a sus complicadas agendas. Una fuente comentó a Us Weekly que “ha sido un reto para la relación desde que Sabrina comenzó su gira, lo que dificultó mantener la conexión”. Otro informante confirmó que ambos coincidieron en que la relación no funcionaba por la distancia y el poco tiempo juntos.